Shakira aceptó el este lunes un acuerdo con las autoridades españolas, en el primer día de su juicio por fraude fiscal en Barcelona, evitando el riesgo de una pena de prisión.
Shakira dijo al juez que aceptaba el acuerdo alcanzado con la fiscalía. Respondió “sí” para confirmar que reconocía los seis cargos por no pagar al fisco español 14.5 millones de euros (unos 15.8 millones de dólares) en impuestos entre 2012 y 2014.
Según el acuerdo, Shakira recibiría una condena en suspenso de tres años de cárcel y una multa de 7 millones de euros (7.6 millones de dólares)
El juicio, que habría incluido más de 100 testigos y durado semanas, se resolvió en su lugar en apenas ocho minutos.