Desde el fin de semana pasado empleados de obras públicas han colocado postes de madera para impedir el paso en una de las zonas más populares de la playa Gandy Beach. La razón es que varios estudios de la zona costera pasado el puente de Gandy Blvd ha dejado mucha preocupación sobre el impacto ambiental en la zona de densos manglares.
La playa siempre ha sido el destino favorito para residentes de Tampa por su fácil acceso ya que los vehículos se pueden estacionar frente de la orilla de la playa y de ahí lanzar kayaks o jet skis. Sin embargo ese fácil acceso ha provocado problemas ambientales por la basura que muchas veces es dejada atrás, también el combustible de los vehículos acuáticos y autos de los visitantes.
La investigación demuestra que desafortunadamente el área estaba fuera de control y el impacto ambiental provocaría devastación del hábitat marino a la larga. Incluso, los trabajadores recogen unas 8,000 libras de basura a diario.
Cabe destacar que el área de la arena paralela con Gandy Boulevard le pertenece al estado y por tanto el Departamento del Transporte Estatal continuará instalando los 900 postes a lo largo de la zona de los manglares. En el lugar también instalarán un portón que tendrá restricciones de acceso eventualmente.
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